Recuerdo que de pequeña mi madre me repetía una y otra vez la misma cantinela: no andes descalza, que vas o coger frio y te vas a resfriar…Años más tarde, viviendo ya en Francia conocí a Minori, una japonesa que frecuentaba la misma escuela de francés que yo. Nos hicimos amigas y pude, de su mano, conocer un poquito más