Detrás de cada cita en Nenha hay mucho más que una hora en agenda.
Hay formación, planificación, precisión, inversión y personas que aman lo que hacen.
Pero también hay una realidad que a veces no se cuenta: el equilibrio entre calidad, puntualidad, sostenibilidad y respeto por una profesión que aún necesita ser reivindicada.
Hoy queremos contarte por qué los tiempos que dedicamos a cada servicio no son negociables, qué hay detrás de cada cita y por qué una política de cancelación no es una medida rígida, sino una herramienta para proteger lo que somos.
Los tiempos de nuestros servicios no se basan en suposiciones. Son fruto de años de experiencia, formación técnica, análisis del comportamiento del producto y respeto por la salud de la uña natural.
Ofrecer resultados finos, duraderos y seguros requiere tiempo. Y también sostenibilidad:
Salarios justos
Productos de alta calidad
Formación continua del equipo
Condiciones humanas para nuestras técnicas
Por eso, cada minuto de tu cita está calculado para ser suficiente, eficiente… y rentable.
En Nenha no trabajamos con clientes esporádicos o servicios rápidos. Nuestro enfoque es personalizado, técnico y con una visión a largo plazo.
Por eso, si es tu primera vez, necesitamos que nos indiques con claridad qué llevas en las uñas, qué deseas, si necesitas retirada, si vienes con uñas muy dañadas… Toda esa información nos permite organizar bien el tiempo y darte el mejor resultado posible.
La puntualidad es uno de nuestros valores, pero también sabemos que a veces no depende solo de la agenda. Cuando una clienta viene con una uña rota, o con un largo diferente, o con un producto mal adherido, necesitamos actuar.
Y hacerlo bien lleva tiempo.
No nos gusta hacer esperar a nadie. Pero si alguna vez has tenido que esperar, probablemente fue porque estábamos resolviendo algo que no podía ignorarse. Y si alguna vez has necesitado más tiempo del previsto, también lo hemos hecho por ti.
Hace años que aplicamos una política de cancelación con 24h de antelación.
No es una medida reciente, y la comunicamos de forma clara:
✔ En la web
✔ En el email de confirmación
✔ En los recordatorios previos a tu cita
Nos gustaría poder ser flexibles con todas las causas (accidentes, olvidos, cambios de última hora…), pero no podemos sostener esa carga sin que afecte al precio, a la calidad o a la estabilidad del equipo.
Cuando una cita se pierde sin margen, no solo es una hora vacía: es una técnica preparada, una oportunidad de trabajo perdida, y una parte del negocio que se resiente.
Nos esforzamos a diario, pero como tú, también tenemos días buenos y días difíciles.
Cuando hay retrasos encadenados, trabajamos al límite. Y eso no ayuda ni al bienestar del equipo ni a la creatividad que exige este oficio.
No deseamos hacer esperar. Pero tampoco deseamos hacer mal nuestro trabajo.
Por eso tratamos cada situación con responsabilidad, intentando cuidar a cada clienta y también a las personas que hacen que este salón funcione.
Este sector está lleno de competencia desleal, de servicios low-cost y de trabajos rápidos que dañan el valor real de esta profesión. Y en Nenha no nos resignamos.
No improvisamos.
No hacemos “arreglos”.
Diseñamos uñas. Construimos confianza. Elevamos el estándar.
Nos esforzamos cada día por ofrecer una manicura que respete la uña, que incorpore los avances técnicos, y que esté a la altura de lo que una clienta exigente merece.
Y sí, a veces nos preguntamos:
¿Por qué nadie duda de pagar 100€ por unas pestañas o una sesión de color, pero una manicura técnica, delicada y duradera se considera cara?
Quizás sea porque la manicura aún no se ha explicado lo suficiente.
Y por eso estamos aquí: para contártelo, y para demostrarlo en cada servicio.
Gracias por entender lo que hay detrás de cada cita.
Por valorar el tiempo, la atención, el oficio.
Y por ayudarnos a seguir mejorando esta profesión que tanto amamos.
Descubre aquí nuestros servicios de manicura rusa profesional.